Los Trastornos del Espectro Autista afectan aproximadamente a 400 mil niños en México, de los cuales solo 1 de cada 115 es diagnosticado¹, esto debido a que su causa aún es desconocida, lo que también dificulta su diagnóstico oportuno.
Utilizando tecnología de imagen de vanguardia, investigadores de Massachusetts General Hospital (MGH) han demostrado que los cerebros de hombres jóvenes con trastornos del espectro autista (TEA) tienen niveles bajos de una proteína que parece desempeñar un papel importante en la inflamación y el metabolismo. Este descubrimiento sorprendente, que se publicó en la revista Molecular Psychiatry, proporciona una nueva e importante perspectiva sobre los posibles orígenes del TEA.
El TEA es un trastorno del desarrollo que aparece en la primera infancia y se caracteriza por la dificultad para comunicarse e interactuar con los demás. Aunque se desconoce su causa, cada vez hay más pruebas que relacionan el TEA con la inflamación del tejido cerebral, o neuroinflamación. Un signo de neuroinflamación son los niveles elevados de una sustancia llamada proteína translocadora (TSPO), que puede medirse y localizarse en el cerebro mediante tomografía por emisión de positrones (PET) y resonancia magnética anatómica (IRM).
El estudio de Mass General, dirigido por la doctora Nicole Zurcher, investigadora del Centro de Imagen Biomédica Athinoula A. Martinos de Mass General, fue el primero en utilizar una nueva generación de «trazadores» PET, que detectan con mayor precisión la TSPO, para examinar los cerebros de personas con TEA.
En el estudio, Zurcher y sus colegas escanearon los cerebros de 15 varones adultos jóvenes (con edad media de 24 años) con TEA. El grupo incluía sujetos de alto y bajo rendimiento con distintos grados de capacidad intelectual. A modo de comparación, el equipo de Zurcher escaneó los cerebros de 18 sujetos de control sanos y de edad similar. La hipótesis de los investigadores era que los escáneres mostrarían mayores niveles, o expresión, de TSPO en sujetos con TEA.
«Para nuestra sorpresa, no fue eso lo que vimos», dice Zurcher. Los escáneres, en cambio, mostraron que los cerebros de los varones con TEA tenían niveles más bajos de TSPO que los de los sujetos sanos. De hecho, los hombres con los síntomas más graves del TEA tendían a tener la expresión más baja de TSPO. Cuando se repitieron las pruebas varios meses después, el patrón persistió. Las regiones cerebrales con baja expresión de TSPO ya se habían relacionado con el TEA en estudios anteriores, y se cree que rigen capacidades sociales y cognitivas como el procesamiento de emociones, la interpretación de expresiones faciales, la empatía y la relación con los demás. «Sabemos que estas regiones cerebrales están implicadas en el autismo», afirma Zurcher.
Para entender este hallazgo inesperado, Zurcher señala que la TSPO hace algo más que servir de marcador de la inflamación. «Tiene múltiples y complejas funciones», afirma, y algunas de ellas favorecen la salud del cerebro. Por ejemplo, una cantidad adecuada de TSPO es necesaria para el funcionamiento normal de las mitocondrias, que son las «centrales energéticas» de las células. Investigaciones anteriores han relacionado el mal funcionamiento de las mitocondrias en las células cerebrales con el TEA.
Zurcher y sus colegas planean estudiar cerebros de donantes fallecidos con el objetivo de determinar qué células cerebrales de las personas con TEA podrían demostrar disfunción mitocondrial, que, según ella, bien podría producirse junto con la neuroinflamación y otros mecanismos causantes del TEA. «Nuestro estudio ha generado nuevas hipótesis que ahora hay que investigar», dice Zurcher. «Hay más trabajo por hacer».
La autora principal del estudio Molecular Psychiatry es Nicole Zurcher, PhD, investigadora adjunta del Centro Athinoula A. Martinos de Imagen Biomédica de Mass General y formadora en Radiología en la Facultad de Medicina de Harvard (HMS). El autor principal es Jacob Hooker, PhD, director de Radioquímica del Centro Martinos y profesor asociado de Radiología en la HMS.
———————————–
¹ Secretaría de Salud del Estado de México
Artículos Relacionados: