¿Sabías que si enfermas de COVID-19 puedes tener algunas secuelas por semanas o hasta meses? A este conjunto de padecimientos se le llama síndrome post COVID o Long COVID.
“El síndrome post COVID es aquel donde persisten los síntomas de la infección de COVID más allá de 4 semanas después de la infección primaria”, dice la Dra. Gloria Aguirre, infectóloga del equipo COVID en TecSalud,
Las secuelas pueden ser fatiga crónica, dolor de cabeza, o la pérdida del olfato y del gusto, pero estudios médicos demuestran que hay una gran diversidad de trastornos en distintos órganos.
Especialistas de TecSalud explican para CONECTA lo que debemos saber sobre este padecimiento, también conocido como COVID persistente.
Síndrome post COVID: secuelas que duran de 4 a 12 semanas
Según la especialista, tras haber superado la infección aguda de la COVID-19, algunos pacientes podrían presentar síntomas prolongados hasta por 12 semanas.
“Después de haber salido de la infección, el Long COVID es la persistencia de los síntomas que puede durar más allá de 4 semanas después de la infección primaria y puede llegar a durar hasta 12 semanas».
Aclaró que si las estas secuelas duran más de 12 semanas, ya se habla de un síndrome crónico.
“Hay algunos expertos que lo dividen en síndrome post COVID agudo y en síndrome crónico, que es cuando dura después de 12 semanas después de la infección primaria”, explicó.
«Long COVID es la persistencia de los síntomas que puede durar más allá de 4 semanas después de la infección primaria y puede llegar a durar hasta 12 semanas».
Daños a nervios e inflamación, las causas
El virus del SARS-CoV-2 utiliza los receptores de la enzima convertidora de angiotensina 2 (ACE2) para ingresar a las células. Esta enzima se encuentra en todo el cuerpo, como la mucosa oral y nasal, pulmones, corazón, intestinos, hígado, riñones, cerebro, entre otros órganos.
El virus, pese a ingresar por el sistema respiratorio, se infiltra en el sistema nervioso causando daños en sus células y reacciones inflamatorias en órganos y tejidos, que son los factores que dejan las secuelas.
“Estas secuelas fueron ocasionadas por el estado de hiperinflamación, por el daño que hizo el virus o la toxicidad que tuvo en los tejidos«.
Luego de que el cuerpo supera la COVID-19, los tejidos pueden tardar en recuperarse. Además, si falla el mecanismo del cuerpo para volver a la normalidad se mantiene la inflamación, pasando a lo que se llama un estado inflamatorio persistente.
“No hay una explicación única para los síntomas post COVID, sino que son varios mecanismos involucrados. Aunque sabemos que la principal complicación es a nivel respiratorio (neumonía), el COVID es una infección sistémica”, explicó Aguirre.
«Estas secuelas fueron ocasionadas por el estado de hiperinflamación, por el daño que hizo el virus o la toxicidad que tuvo en los tejidos«.
Las secuelas más comunes del síndrome post COVID
– Fatiga (58 %)
– Dolor de cabeza (44 %)
– Pérdida de cabello (25 %)
– Dificultad para respirar (24 %)
– Pérdida del gusto (23 %)
– Pérdida del olfato (21%)
¿Si tuve COVID-19 tendré alguna secuela?
No necesariamente todos los pacientes de COVID pasan por estas secuelas; aunque, la mayoría son quienes estuvieron hospitalizados o en terapia intensiva, explicó la especialista.
“Hay varios estudios donde se ha reportado esta persistencia de los síntomas dónde, por ejemplo, de que entre el 80 o 90% de las personas que fueron ingresadas a un hospital persistieron con síntomas después de haber tenido el COVID.
“Tal vez la proporción es mayor porque muchos estuvieron en terapia intensiva y perdieron masa muscular o con algún grado de desnutrición. Algunos persisten con 1 o 2 síntomas y hasta la mitad de ellos se habla que pueden tener 3 o más”, dijo.
En general, dijo la especialista de TecSalud, se habla de que un tercio de los pacientes de COVID-19 podrían tener secuelas.
¿Si tengo síndrome post COVID me puedo recuperar al 100 %?
Según la especialista, la recuperación dependerá de cada persona, su estado de salud y si ya padece de comorbilidades, como diabetes o hipertensión, así como de la severidad y nivel de afectación de las mismas secuelas.
“En personas previamente sanas el pronóstico se estima que es bueno. En pacientes que tengan una comorbilidad lo más importante es que sigan en tratamiento de sus enfermedades de base”, comentó la doctora.
El Dr. Reynaldo Lara, infectólogo de TecSalud, señaló que aún no hay evidencia científica sobre la duración de estas secuelas.
«Sabemos que esta (COVID-19) es una enfermedad nueva. Tenemos de conocerla un año y medio. Es importante seguir investigando. En este momento difícilmente podemos saber qué tanto tiempo perduran las secuelas. Solo el tiempo nos los dirá»:
«Es importante señalar es que muchas de estas complicaciones tienen una formas de rehabilitación, para que las secuelas que hayan quedado de esta enfermedad sean las mínimas«.
¿Sigue el virus SARS-CoV-2 en el cuerpo?
La Dra. Aguirre señala que el síndrome post COVID se presenta luego de la infección primaria, por lo que el virus ya no se encuentra activo.
“El Long COVID son las secuelas que dejó la infección aguda por COVID, pero no significa que el virus sigue en el cuerpo de la persona. Por lo tanto, ya no se contagia a otras personas”, comentó.
Personas asintomáticas pueden tener COVID persistente
Algunos estudios demuestran que las personas asintomáticas de COVID-19 pueden tener afectaciones por el Long COVID, dijo la Dra. Aguirre.
“Sí, hay personas que pueden cursar asintomáticas durante la infección aguda y después presentar estos síntomas de post COVID o estas secuelas. En ellos hacer el diagnóstico se vuelve todo un reto”, añadió.
«Aunque sabemos que la principal complicación es a nivel respiratorio (neumonía), el COVID es una infección sistémica».
Variante Delta y personas vacunadas: incógnitas ante secuelas
La doctora de TecSalud señaló que en cuanto a la variante Delta o en quienes ya se vacunaron no hay evidencia que indique que el síndrome post COVID sea más grave.
“La variante Delta se transmite mucho más y se estudia si tiene más probabilidad de dar enfermedad severa. Es muy pronto para establecer si tiene mayor riesgo de dar síntomas post COVID».
La especialista menciona que las personas vacunadas podrían tener menos riesgo, pero aún no hay estudios científicos que valide esta información.
“Tal vez haya relación, ya que al disminuir el estado de hiperinflamación también baje el riesgo de síntomas post COVID, pero aún no hay datos al respecto”, señaló.
Si detectas síntomas prolongados, acude al médico
Aguirre comentó que, en caso de que hayas superado una infección de COVID-19 y tengas síntomas prolongados, lo ideal es acudir con un especialista.
“Cualquier síntoma debería ameritar valoración. Algunos síntomas pueden parecer leves, pero sean cuales sean los síntomas, siempre hay que acudir a valoración para tratar de descartar otras causas.
“Es importante que no se automediquen. No pasar por alto ningún síntoma porque se nos hace muy fácil automedicarnos, por ejemplo, si nos da diarrea o fiebre«.
La Dra. Aguirre dijo que no se puede pasar por alto ningún síntoma, por lo que siempre hay que buscar una valoración médica.
Recalcó que las señales de alerta para buscar ayuda médica pueden ir desde dolor torácico, falta de mejoría en la falta de aire, fiebre o cualquier síntoma que dure más allá del periodo de infección aguda de COVID-19.
Las partes del cuerpo donde se manifiesta
De acuerdo a un estudio del British Medical Journal, el síndrome post COVID se puede manifestar de diferentes maneras:
* Pulmones
– Disnea (dificultad para respirar)
– Dolor de pecho
– Tos seca
* Páncreas
– Pancreatitits (Dolor abdominal, náuseas, vómitos y fiebre)
– Daño pancreático
* Riñones
– Lesión renal aguda
– Deterioro de la función renal (hinchazón de extremidades, menos orina, falta de aire)
* Cerebro (daños neurológicos)
– Dolor de cabeza
– Depresión
– Ansiedad
– Niebla mental (falta de concentración)
– Fatiga
– Trastornos de sueño (insomnio)
* Corazón
– Dolor en el pecho
– Miocarditis
– Arritmias
– Aumento de troponinas, que equivale a daño al corazón
* Bazo
– Disminución de linfocitos B y T.
– Atrofia de folículos linfoides (productores de anticuerpos)
* Hígado
– Daño hepático (Color amarillo en ojos-piel, náuseas, orina oscura, heces pálidas, hinchazón, fatiga, moretones, pérdida de apetito, comezón en la piel).
* Tracto gastrointestinal
– Diarrea
– Náusea
– Dolor abdominal
* Otros
– Pérdida de cabello
– Pérdida del olfato y el gusto
– Sudoración nocturna
– Tinnitus (ruido en los oídos).
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