Consideradas por la Organización Mundial de la Salud como una de las epidemias del siglo XXI, las alergias son una de las enfermedades que mayor atención atraen de la ciencia.

Una de cada ocho personas en todo el mundo tiene algún tipo de alergia. Un número realmente alto para una patología de la cual muchas veces se desconoce la causa y hasta el día de hoy no existe cura.

Bien dicho: hasta hoy. Una investigación realizada por la Universidad de Queensland (EE UU) logró desactivar la respuesta inmunitaria que provoca la reacción alérgica en el organismo.

“Cuando alguien tiene una alergia o un brote de asma, los síntomas que experimentan son resultado de las células inmunes que reaccionan a la proteína en el alérgeno”, explicó Ray Steptoe, líder de la investigación, en el trabajo publicado en la revista especializada JCI Insight.

En las alergias, el pelo de animales, determinados alimentos, los pescados y mariscos, picaduras de insectos o el polen generan que las células inmunes que reaccionan (células T) desarrollan una forma de memoria inmune, por lo que se vuelven muy resistentes a los tratamientos.

En este aspecto, la investigación ha dado en la tecla al conseguir “limpiar” esa memoria de las células T en un grupo de roedores gracias a la terapia génica, provocando que el sistema inmunológico sea insensible y no reaccione ante la proteína, sino que la tolere.

Una de cada ocho personas en todo el mundo tiene algún tipo de alergia. Un número realmente alto para una patología de la cual muchas veces se desconoce la causa y hasta el día de hoy no existe cura.

La solución definitiva

El trabajo utilizó un alérgeno experimental del asma, pero esta investigación se podría aplicar para tratar también a las alergias severas al maní, veneno de las abejas y otras sustancias.

No obstante, los investigadores señalaron que se necesitarán “cinco o seis años más para trabajar en el laboratorio antes de iniciar pruebas clínicas en voluntarios, lo que llevará la misma cantidad de tiempo”. 

El objetivo es conseguir una inyección que sirva como tratamiento único y permanente para todas las alergias.

El objetivo es conseguir una inyección que sirva como tratamiento único y permanente para todas las alergias.

Una epidemia mundial

La OMS sitúa las alergias como la cuarta enfermedad más importante en el mundo.

Se calcula que afecta a alrededor de 300 millones de personas, lo que conlleva graves consecuencias a nivel social y económico.

El costo de los tratamientos, la pérdida de calidad de vida de quienes las sufren y los costos derivados del ausentismo laboral son algunos de los inconvenientes que derivan de la que ya se ha llamado la epidemia del siglo XXI.

En la situación actual, la OMS prevé que unos 500 millones de personas tendrán asma en el año 2050, el doble de los casos diagnosticados actualmente.